PROCESO DE GALVANIZACIÓN EN CALIENTE
Como ya hemos comentado, el galvanizado en caliente es un sistema de protección contra la corrosión, que consiste en la formación de un recubrimiento de Zinc y de aleaciones de zinc–hierro por inmersión de las piezas, en un baño de Zinc fundido a 450ºC.
El revestimiento de piezas con Zinc, es debido a que éste es muy activo y se oxida muy rápidamente con el oxígeno del aire, formando una capa de óxido de Zinc, que protege de toda corrosión hacia el interior de la pieza.
Actualmente, se utiliza para la protección de todo tipo de estructuras, como pueden ser edificaciones, construcción, mobiliario urbano, electricidad y telecomunicaciones, automoción, agricultura y ganadería, deporte y ocio, etc.
Durante el galvanizado, se producen en la interfase acero-zinc, diferentes tipos de aleaciones zinc–hierro debido fundamentalmente, a la difusión bidireccional del zinc líquido con la superficie del acero. (Ver capas)
Calidad en el recubrimiento de galvanizado
Dependerán de:
☑️ Calidad del Zinc.
☑️ Calidad del acero base y su composición química.
☑️ Espesor del recubrimiento.
☑️ Acidez de la lluvia en el lugar de exposición.
☑️ Los contaminantes ácidos en el ambiente donde estarán ubicados.
☑️ Erosión producida por el polvo y la arena, impulsados por el viento.
Revisión y colgado del material
El material es sometido a una inspección visual y se comprueba que es apto, para galvanizar en caliente:
√ Debe estar limpio, exento de barnices, aceites, pinturas, grasas consistentes, etc.
√ Debe cumplir las condiciones de seguridad: todas las piezas deberán estar diseñadas según la Norma UNE-EN-ISO 14713-2:2011.
Una vez revisadas las piezas, se procederá a su cuelgue para iniciar el proceso de decapado.
Fase de decapado
El proceso de decapado consiste en la limpieza del material de los óxidos metálicos, la cascarilla de fabricación del laminado y de cualquier otra impureza, que pueda impedir la reacción del hierro con el Zinc.
Para dejar la superficie del material limpia, se sumergen las piezas en las cubas que contienen una disolución de ácido clorhídrico.
Una vez terminada la fase de decapado y tras una inspección visual donde se controla que las piezas estén limpias, éstas pasan a la siguiente fase.
Fase de lavado (pre-fluxado)
Mediante la inmersión en una cuba con agua, se eliminan el ácido y las sales de hierro que el material arrastra de la fase anterior.
Fase de fluxado
Consiste en la inmersión del material a galvanizar, en un baño formado por una disolución de sales de cloruro de Zinc y cloruro amónico, a una temperatura de unos 60ºC (flux).
En este baño, el material está el tiempo suficiente para que quede la sal depositada, tanto en la superficie interior como exterior; quedando ésta activada para que el acero reaccione mejor con el Zinc fundido del baño de fusión.
Además, al aumentar la temperatura del material, esto disminuye el contraste de temperatura con el baño de Zinc, mejorando la galvanización.
Baño de zinc
Una vez bien escurrido el material, se realiza la inmersión de éste en el baño de Zinc fundido a una temperatura de 450ºC.
Inspección y empaquetado tras el galvanizado
Una vez sacado el material del baño de Zinc, se procede a su enfriamiento a temperatura ambiente y si es necesario, se sumerge en una cuba de agua para finalizar su enfriamiento y poder así, manipular las piezas en el proceso de revisión y empaquetado.
En la inspección de aceptación se revisa todo el material, observando que esté conforme a la Norma UNE-EN ISO 1461 2023, en cuanto a nivel visual y espesor de recubrimiento de galvanizado.